Sal para hacer disolución casera

El agua salada es uno de los mejores remedios naturales que puedes usar para tus piercings, si por ejemplo, tienes problemas con ellos. Sin embargo, es necesario que esta no contenga demasiada suciedad o bacterias, ya que podría ser peor el remedio que la enfermedad. Por eso, evita por ejemplo la sal para cocinar, ya que a menudo la tiñen de blanco o le añaden yodo o sal marina.

Esta sal a penas contiene yodo y por tanto es ideal para usar en una disolución salada isotónica hecha en casa. Puedes comprar la sal marina en herboristerías o en nuestra tienda online en pequeñas cantidades (20 gramos), que te bastarán para preparar hasta 4 litros de disolución.

Así de fácil es la preparación:

1. Añade 1,25 gramos de sal (1/4 cucharadita para el té) por cada 2,5 dl de agua limpia.
2. Lleva el agua a ebullición, y al mismo tiempo asegúrate de que la sal se ha disuelto en el agua.
3. Opcional: añade 2 gotas de aceite de jojoba al agua.
4. Deja enfriar la disolución.

A continuación ya puedes usar la mezcla y sumergir tu piercing durante unos 5 minutos. Repite este proceso por la mañana y por la noche y pronto dejarás de tener problemas con tu piercing.

Puedes preparar cierta cantidad para usarla repetidas veces, pero la tendrás que manetener en frío y esterilizada. Por eso, cada vez que necesites un poco para usarla en tu perforación, tendrás que separar un poco en otro recipiente distinto, de modo que la mayor parte no se pueda infectar.

Recuerda que si añades aceite de jojoba a la mezcla no debes usarla para las perforaciones orales. Si no la añades, también puedes usar esta disolución para tus piercings orales, como por ejemplo el piercing en la lengua.

Si no quieres preparar esta disolución, por supuesto también puedes conseguir agua salada isotónica lista para usar en espray en nuestra tienda.