He aquí una dulcísima joya para tu piercing en el ombligo con una calavera que brilla como un puñado de diamantes. Los brillantes de esta calavera son de color blanco y están tan juntos entre ellos que cubren toda su superficie, excepto por los agujeros para los ojos y la nariz. Sus ojos son dos agujeros muy grandes, mientras que su nariz tiene una curiosísima forma de pequeño triángulo.

Esta radiante calavera lleva además una corona, por lo que sospechamos que se trata de la calavera de una dulce princesa. La corona queda inclinada a un lado de la cabeza y tiene 4 pequeños brillantes también blancos, uno en cada uno de las puntas.

El material con el que está hecha esta joya es el acero quirúrgico, y en el extremo superior de su barra de 10 mm de longitud hay colocada una bola. En cuanto a ésta, ahora también tienes la posibilidad de llevar un último brillante en ella, que le dará un look definitivo (más, si se puede) a tu nueva joya.